Piel grasa

¡Quita el brillo de tu rostro! Tratamientos naturales para mujeres con piel grasa

¿Tienes piel grasa? Entonces seguramente lo habrás intentado todo para verte liberada de este problema, tan extendido en las mujeres mucho más de lo que se cree. La piel que tienes te llegó por herencia, no obstante hay factores externos como la menopausia, el embarazo o los cambios hormonales que influyen en el brillo de tu cara. Si tienes este tipo de piel, es necesario que realices algunas rutinas que te ayuden a controlar ese exceso de grasa. No te afanes, acá te daremos algunas recomendaciones que te pueden ayudar bastante.

 

Cuando se tiene piel grasa es normal que surjan los molestos barros y espinillas que tanto nos avergüenzan, sin embargo, el tener la piel grasa ofrece también sus ventajas. Para empezar, una mujer con estas características se va a ver más joven por más tiempo ya que este tipo de piel retiene la elasticidad y tiene mayor capacidad de soportar las arrugas que la que presenta una piel normal. Si te gusta tomar el sol vas a hallar otra ventaja porque la piel grasa tiene mayor resistencia para soportar los efectos perjudiciales del astro rey. Una piel grasa, además, resulta más fácil de tratar que una piel seca.

 

 

Para tu piel grasa debes prestar atención a la limpieza de tu cutis. No te vayas a los extremos, si lo limpias con demasiada frecuencia puedes potenciar la aparición del acné, y si recuerdas bien, ya te habíamos hablado acerca de aquellas molestas protuberancias (si no has leído el artículo, ¡léelo ya!).

Ojo con los productos cosméticos. El sitio http://www.mundotkm.com/ brinda algunos consejos de maquillaje para mujeres con este tipo de piel, sin embargo, antes de empezar a aplicar productos cosméticos asegúrate de que tu kit no contenga sustancias muy agresivas que alteren el balance de tu Ph. Habiendo dicho esto, miremos que tiene la naturaleza para ofrecernos al respecto.

 

 

Algunos de estos aceites ayudan a reducir los niveles de grasitud, especialmente si son aceites cítricos como el de naranja, limón o el de la toronja ya que regulan el pH natural de tu piel sin llegar a ser tan ser agresivos como los productos cosméticos tradicionales.

Exfolia tu piel regularmente, así destapas tus poros y eliminarás puntos negros. Una limpieza superficial no va a erradicar toda aquella suciedad acumulada en los poros, que es la que hace que aparezca aquel brillo en tu cara. Para exfoliar emplea un exfoliante cosmético que no sea demasiado agresivo, aunque tú misma puedes preparar tu propio exfoliante casero.

 

 

La naranja contiene nutrientes y antioxidantes que trabajan en pro de tu piel. Si te tomas el jugo de dos naranjas en ayunas diariamente, en 15 días vas a empezar a notar como tu piel no brilla tanto como antes.

Este aceite regula las glándulas sebáceas de tal forma que éstas van a empezar a producir menos grasa. Aplica el aceite después de lavarte la cara antes de ir a la cama, déjalo toda la noche y a la mañana siguiente te lavas con normalidad.

Bate una clara de huevo a punto de nieve y añade unas gotitas de limón. Después aplica la mezcla sobre el rostro y espera a que se seque. Una vez se haya secado lávate con agua fría. Este tratamiento lo puedes realizar un par de veces a la semana.

Mezcla entre una y tres cucharadas de maicena con agua tibia hasta formar una pasta. Ahora aplica sobre tu rostro y espera a que se seque. Enjuaga con agua tibia.

Una mascarilla facial preparada con esta increíble fruta es perfecta para tratar la piel grasa. Vas a mezclar media taza de manzana pisada con media taza de avena cocida, clara de huevo y una cucharada de jugo de limón. La pasta que obtengas de esta mezcla la vas a aplicar en tu rostro y la dejas ahí por 15 minutos, luego enjuaga con agua fría.

La mascarilla de yema de huevo ayuda a secar la piel y reducir los aceites. Si lo prefieres, puedes aplicar la yema con un hisopo en las zonas más brillantes. Espera a que la yema actúe por 15 minutos y después enjuaga.