Un invierno plagado de sexo gay

 

Que ilusión tengo de que llegue la Navidad chicos, sé que para muchas personas es una época del año muy triste porque han perdido a seres queridos por estas fechas, pero mis mejores recuerdos son en diciembre y Enero, fundamentalmente porque fue cuando oficialmente salí del armario como se suele decir y mi familia lo aceptó estupendamente con total naturalidad.

También en diciembre tuve mi primera experiencia homosexual, concretamente en  nochebuena cuando fui con 19 años a mi primer local gay.

 

Me acuerdo hasta del nombre del chico con el que tuve sexo, se llamaba Jose y tenía 32 años, como es normal me enseñó muchas cosas y de él aprendí el tiempo que duró nuestra relación.

También descubrí que los gays suelen ser bastante promiscuos al menos cuando son más jóvenes, pero vamos, eso también les pasa a los y las chicas hetero y más hoy en día porque vas a las discotecas y allí folla todo el mundo jejeje.

Otra de las cosas que descubrí por esas fechas fue mi primer orgasmo anal, woooooow, pensaba que el ano era solo un orificio destinado a la penetración y nada más lejos de la realidad, descubrí el placer de la masturbación anal y que es posible eyacular sin prácticamente usar las manos solo con la estimulación del ano o la próstata si sabes hacerlo bien.

Yo siempre había envidado a las chicas porque pensaba que sus orgasmos durante la penetración no se podía igualar al de los hombres, pero con los años y las experiencias sexuales que he tenido me parece que no tenemos nada que envidiarles, ¿a que si chicos?...

En fin, afronto estas fechas como lo más maravilloso que me puede pasar durante el año y a mi si me hace ilusisión montar el belén y esas cosas. Deseo que lo paséis bien y disfrutéis de la familia porque es lo único que nos queda al final, pero sobretodo que tengáis mucho sexo del bueno porque es uno de los motores de nuestra vida y encima es gratis ;D.

 

 

Ligando con un chico gay este verano

 

Me acaricio el muslo suavemente mientras veíamos videos xxx gays, y deslizó su enorme manaza poniéndola sobre una de mis nalgas, con habilidad haló el calzoncillo cara abajo dejando al descubierto mi trasero entero en un movimiento, con exactamente la misma mano que me había tomado la nalga y bajado el calzón la metió por en medio entre los muslos hasta tocar los empapados labios de mi pucha, que por la situación en que me hallaba sentada para besarnos, estaba absolutamente cerrada por los sustanciosos labios externos, yo por mi parte inmediatamente puse mi mano sobre el bulto bajo su pantalón, asimismo una mácula húmeda se formaba ahí, al poner mi mano note la tremenda dureza del bulto.

El con habilidad y mi colaboración termino de bajar mi tanguita y sacarla de mis piernas las que mudando de situación pude entornar a fin de que su mano tomara plena situación sobre mi húmeda cuca, con el anular sacaba una parte de mi jugo y lo cara deslizar durante mi raja, estimulando y jugando exquisitamente con mi clítoris, me comentó ¡tienes un clítoris enorme como una polla!, si le afirmé, te molesta?....¡para nada! que exquisitez.

Con el dedo pulgar oprimía y jugueteaba con el clítoris al tiempo que me introducía el cancelar, entonces metió 2 dedos y más tarde 3 en un movimiento de meter y sacar al que cada vez le daba pero velocidad, el placer que esto me ocasionaba era tremendo, gritaba y daba grititos de gozo al paso que arqueaba cara arriba mi cadera con deseo de que esos dedos llegasen pero de forma profunda. Excitada al límite di un giro provocando que los dedos saliesen de mi vagina y me abalancé sobre su bulto, atropelladamente desabroché su cinto, desabotone el pantalón y zipper y baje el pantalón, arqueó la cadera cara arriba ayudándome, lo mismo hice con la trusa y también de manera inmediata salto el moreno pedazo de carne embrutecida con venas hinchadas al límite tal y como si fuesen a reventar, me llamaron horriblemente la atención su grosor y la gran cabeza, se erguía sobre una cama de tupidísima vellosidad que cubría vientre y pubis, del ojillo de la cabeza fluía gran cantidad de liquido lubrificante tal y como en mi sucedía, tomé aquello a 2 manos y acerque mi boca de latino follando para chupetearlo con deseo enorme, la gran cabeza llenó mi boca, y inmediatamente sentí el rico sabor de su jugo, con la punta de mi lengua recorrí el ojillo del que manaba aquel juguito y la chupe y chupe con éxtasis, el levantó mi cabeza haciendo que el pene saliese de mi boca, alcancé a escucharle que me afirmaba espera estoy a puntito de venirme y aún no deseo, comprendí de forma perfecta, asimismo deseaba que eso sucediese en mi.

Deslizó el asiento cara atrás y acostó el respaldo, con su mano puso vertical aquella gruesa y dura pieza de ébano y con un movimiento de cabeza me invitó a montarme, no lo pensé un par de veces, era exactamente lo que deseaba, el volante me impidió hacerlo lugar desde donde estaba, de tal forma que baje del coche, para subirme por su parte, instantes que aprovechó para sacarse absolutamente su pantalón y trusa, abrí la puerta, tome unos segundos para echarle otro vistazo a aquel precioso leño que esperaba a encajarse en mi cuerpo, me recogí el vestido hasta el estomago y le monté poniendo mis rodillas sobre las riberas del asiento que ocupaba, metió su mano por atrás de mis muslos y nalgas, saco de mi vagina algo de mis rebosantes jugos y embarró la contumaz, trató de ponerla en mi empapado orificio equivocándose a la primera poniéndola en el ano, no, no, replique ahí no es y con mi mano la puse en la entrada precisa, empujo ligeramente y me senté asimismo ligeramente, apenas entró y sentí el tremendo estiramiento que provocaba el grosor de aquella contumaz, probablemente estaba siendo consciente de lo que tenía y no deseaba herirme, de tal modo que lo fue introduciendo muy de manera lenta mientras fuera había unos cuantos chicos gays exhibicionistas, trocito a pedazo, mientras que sentía como las paredes de mi vagina se estiraban al límite, era un dolor intenso mas al tiempo un enorme placer. De esta forma poquito a poco me la fue metiendo, y conforme avanzaba, el ardor se cara pero intenso como el inconmensurable placer, al fin sentí que la tenia toda adentro pues sentí sus vellos cosquilleándome en los labios plenamente abiertos de mi adolorida cuca, estaba absolutamente adentro y nuestros vellos se unían en una pelambre, quedamos inmóviles por múltiples segundos disfrutando de aquella exquisitez en la profundidad de mis supones, las paredes de mi vagina estiradas al límite comenzaban a amoldarse y a atenuar el dolor, contraje los músculos de mi vagina apretando para sentirlo y hacerle sentir, respondió con un quejido, estaba en completo éxtasis con aquel miembro enorme y caliente en mi, me di cuenta que realmente no era tan largo puesto que no me hería en la profundidad y si por lo grueso llenaba absolutamente mi vagina exquisitamente, era la fantasía de cualquier mujer quien agrada de los buenos penes. En la situación que se hallaba entre el asiento y mi cuerpo encima lo limitaban para llevar la iniciativa de los movimientos tradicionales de una buena cogida, fui entonces quien tomo la iniciativa haciendo movimientos circulares lentos y cadenciosos con mi cadera, levantando muy poco a poco el trasero apretando al límite la vagina a fin de que saliese despacio, aflojaba y me volvía a sentar igualmente lento sobre sus muslos a fin de que regresara en el fondo, sentía que moría de placer y el con sus gruesos quejidos de hombre me mostraba que asimismo disfrutaba mucho, repetía de nuevo los movimientos y no duró bastante tiempo hasta el momento en que se tensó su cuerpo y inmediatamente sentí en el fondo de mi vientre el chorretaso de semen hirviendo, se repitieron dos veces pero mientras que su cuerpo se cimbraba, aquello no me complació totalmente por el hecho de que aún no lo alcanzaba incluso cuando comenzaba a sentir recorrer por mi cuerpo el tradicional cosquilleo que me anunciaba que pronto alcanzaría el clímax y enseguida explotaría con mi clímax, no obstante sus estertores y las bajezas que susurraba a mi oído, como “que exquisitez de trasero tienes nena”, “que rico aprietas con esa panocha deliciosa”, “coges como una reina”…etc, etc, provocaron que en pocos segundos cuando el acababa explotaba en tremenda venida.

Nos fundimos en otro beso y apretamos nuestros cuerpos de forma fuerte, el mamó mientras veía a gays follando y hasta mordió mis senos y no sentí dolor alguno, mis movimientos se hicieron pero violentos dándome sentones veloces y fuertes estrellando mis nalgas en sus muslos, me venia una y otra vez, estaba en el clímax total, ya no me dolía nada. Al fin acabó aquella insensatez y fuimos recuperando la serenidad, nos miramos fijamente a los ojos, satisfechos los dos, sonriendo y dándonos besos, cuando comencé a sentir que la presión en mi vagina cedía sensiblemente, golosa para eludir que saliese de mi, traté de apretar de nuevo mas ya había poco que hacer, es pero lo único que conseguí fue expulsarlo pero velozmente como la gran cantidad de semen que me había vertido, fue entonces que mezclado con mis jugos vaginales acompañado con un sonoro pedo que me salió de la vagina debido al aire que me había entrado a lo largo del mete y saca, todo bajo repentinamente de mi vagina derramándose sobre su vellosidad y testículos. Entristecida me excusé, aclarando que no había sido del estomago y que no lo había podido eludir, rió entretenido comentándome que era natural. En el coche, el calor era infernal y el fragancia a semen y vagina era tremendo y como resultaba peligroso proseguir ahí en el estacionamiento acordamos proseguir en un motel, sin pero ni pero nos arreglamos la ropa, tomé unos diez pañuelos tirables y me los puse en la cuca de la que proseguían saliendo sus mocos y los míos, entonces me puse la minúscula tanga, paso a su turismo y salimos de ahí a proseguir cogiendo exquisitamente por horas.

En los asientos de mi coche quedaron las huellas de aquel exquisito acto sexual, las que al otro día en que aún olía penetrantemente a semen y vagina, debí adecentar y lavar afananosamente recordando aquellos instantes de tanto placer.